Obtener un crédito simple para tu empresa es un proceso de cierta complejidad, así que debes tener muy bien definido el destino que darás a ese dinero para obtener de él la máxima ganancia posible.
Los usos más recomendables para un crédito simple son proyectos especiales, activo fijo y capital de trabajo. Abrir una nueva sucursal, participar en nuevos negocios, diversificar tu actividad empresarial o incursionar en nuevos mercados son ejemplos de proyectos especiales. Adquirir mobiliario, equipo, materiales y bienes muebles e inmuebles son acciones destinadas al activo fijo. Cubrir los costos operativos regulares de tu negocio se incluye en el rubro del capital de trabajo.
En cualquiera de estos casos, es importante que consideres el costo de ese crédito dentro de tus planes financieros para que cumplas tus compromisos y conserves un buen historial crediticio. Considera que gastar tu crédito en cualquier otra cosa que no puedas clasificar en alguna de las categorías anteriores no es una decisión recomendable, porque no se traducirá en beneficios para tu empresa y solo te ocasionará una deuda.
El crédito simple que DiSí Operaciones te ofrece es una inyección de capital fresco para impulsar el desarrollo de tu negocio. Con tu registro en www.disioperaciones.com, te facilitaremos la liquidez que necesitas para cumplir tus objetivos empresariales con bienestar financiero. ¡Tú escoge… DiSí!
